MAIB revela que un remolcador se hundió en 10 segundos debido a un fallo del sistema de seguridad
La División de Investigación de Accidentes Marítimos (MAIB) ha publicado su informe de investigación del accidente sobre el vuelco del remolcador de 16.25 metros Mordedor mientras remolcaba el buque de pasajeros de 67.1 metros Princesa de las Hébridas hacia el muelle James Watt en Greenock el 24 de febrero de 2023.
El incidente, que se cobró dos vidas (la del capitán del remolcador George Taft y la del marinero Ian Catterson), ocurrió durante las pruebas rutinarias del motor y el equipo del Princesa de las Hébridas. El remolcador se hundió en menos de diez segundos y, según la MAIB, se debió a una “avería de los sistemas que deberían haberlos mantenido seguros”.
El MAIB reveló varias fallas críticas. El remolcador se vio afectado por fuerzas de "ceñido" y volcó cuando no pudo invertir la dirección para operar a popa del Princesa de las Hébridas. El mecanismo de seguridad crucial, la "cuerda de seguridad", no impidió que el barco fuera remolcado lateralmente. Además, una escotilla de alojamiento abierta comprometió la integridad estanca del remolcador, lo que limitó las posibilidades de supervivencia de la tripulación.
Andrew Moll OBE, inspector jefe de Accidentes Marítimos, comenta: “El remolcador mordedor “El accidente fue otra cruel lección de cuán rápido las cosas pueden ir terriblemente mal”.
La investigación también descubrió una formación inadecuada de los pilotos marinos de Clydeport para trabajar con remolcadores convencionales como Mordedor y comunicación incompleta entre el piloto, el capitán del buque y el capitán del remolcador.
La MAIB ha emitido recomendaciones a Clyde Marine Service Ltd. para que revise sus sistemas de gestión de seguridad y evaluaciones de riesgos, en particular en lo que respecta a los aparejos con cabos de arrastre y las velocidades de maniobra seguras. También se ha recomendado a Clydeport Operations Ltd. que encargue una revisión independiente de la formación de los pilotos marinos.
“Los remolcadores convencionales pequeños siguen siendo una parte esencial de las operaciones portuarias del Reino Unido. Sin embargo, quienes los operan y controlan deben comprender las vulnerabilidades de estos buques.
“Las autoridades portuarias, los capitanes de los barcos y remolcadores y los prácticos deben asumir colectivamente este riesgo. Los prácticos y las tripulaciones de los remolcadores deben estar adecuadamente formados y tener experiencia para sus funciones y compartir un conocimiento detallado del plan de remolque antes de comenzar el trabajo. La velocidad, que afecta exponencialmente a las fuerzas de remolque, debe controlarse cuidadosamente y las cuerdas deben colocarse correctamente. Todos los implicados deben supervisar la ejecución del plan y, si es necesario, actuar para garantizar la seguridad de todos”, añade Moll.
MIN informa periódicamente sobre las conclusiones del MAIB sobre accidentes marítimos. FMás detalles sobre el Mordedor tirar y Princesa de las Hébridas están disponibles para leer y descargar en línea.